El punto de partida fue el cóctel de bienvenida denominado «Mictlán ,» una mezcla única de jarabe de camote con violeta, licor de coco «pa’l espanto,» y agua mineral, preparando nuestros sentidos para la experiencia que avecinaba.
En una noche envuelta en folclore y sabor, el restaurante «La Casa de los Magueyes» en Huamantla, Tlaxcala, llevó a sus comensales en un fascinante viaje al Mictlán con una cena temática de cinco tiempos, guiada por el ingenio de chefs destacados y el arte de maridar cócteles del prodigioso Héctor Alvarado, embajador de Bartenders México en Tlaxcala.
El primer tiempo, «Itzcuintlan» del Chef Paco Gutiérrez de Panería Rústica, presentó un Tamalito pinto sobre un espejo de mole de pistache, hortalizas y un gel de pétalos de cempasúchil. El acompañamiento, un equilibrado cóctel de agua de coco con licor de coco «pa’l espanto,» jarabe de cempasúchil, agua mineral y perlas sabor cereza, una armoniosa combinación.
La travesía continuó hacia «Itztpeti,» la «Montaña de obsidianas,» bajo la dirección del Chef Gabriel Jiménez del Instituto Valladolid, Calpulalpan. La «Sopa del ánima sola,» receta tradicional de las monjas clarisas, lleva cempasúchil deshidratado en sopa de verduras y crema, maridada con un Negroni reconstruido infusionado con camote morado y agua tónica.
En el tercer acto, «Itzecayan,» el «Lugar de los vientos de obsidia,» del Chef Gerardo Sánchez Mares, nos sorprendió con un medallón de cerdo en cóctel de naranja, ajonjolí y canela, acompañado de salsa de Chilacayote, tomatitos y cebolla cambray. Como maridaje perfecto, un mojito con licor de coco, jarabe de canela, piña asada y toques de copal, incienso y canela.
El cuarto tiempo, «Temiminaloyan,» donde «se flecha a la gente,» del Chef de la casa, Sebastián De Jesús, presentó una pechuga de pollo rellena de verdolaga ahumada, en una salsa de calabaza de Castilla y una terrina de calabaza con queso parmesano y hierbas de olor. El maridaje, un Mezcal con destilado de caña y fusión de cempasúchil, limón, maracuyá, jugo de mandarina, licor de naranja y piña, ahumado con copal y semilla de calabaza, fue un deleite.
El cierre, «Apanohualoyan,» el «Lugar donde hay que cruzar el agua,» presentó la creatividad de la Chef Lety Macías con una hojaldra rellena de arroz con leche y salsa de guayaba, acompañada de un Capuchino con leche de pulque o café de olla, e infusión de romero, sellando la velada con un broche de oro.
Esta cena temática, la séptima organizada por el Consejo Gastronómico Tlaxcalteca, no solo exaltó la riqueza culinaria de la región sino que también reconoció el compromiso del restaurante «La Casa de los Magueyes» al otorgarle una placa conmemorativa. Así, Tlaxcala se consolida como uno de los destinos gastronómicos más importantes de México, gracias a eventos que celebran la tradición y la innovación en cada bocado. ¡Una experiencia única que deja un sabor imborrable en la memoria gastronómica de quienes participaron!
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