Anel Bañuelos: Más fotos, menos resultados en el Poder Judicial
- La gestión de Anel Bañuelos, marcada por simulación y ausencia de resultados.
La presidenta del Poder Judicial de Tlaxcala, Anel Bañuelos Meneses, continúa implementando estrategias que generan más dudas que resultados, siendo el reciente banderazo de inicio del CEJA Móvil en Santa Apolonia Teacalco otro ejemplo de acciones que parecen diseñadas para la foto más que para beneficiar a los ciudadanos.
Aunque el discurso oficial presenta esta iniciativa como una solución accesible y eficiente para resolver conflictos a través de la mediación, la realidad muestra lo contrario. El CEJA Móvil no solo carece de una estrategia clara para informar a la población sobre sus servicios, sino que su operación es limitada, deficiente y con escaso seguimiento. Según testimonios locales, la atención que ofrece es poco funcional, con procesos burocráticos y tediosos que desaniman a los usuarios desde el inicio.
A esto se suma la falta de resultados concretos. No existen reportes públicos que muestren la efectividad del programa ni cifras que respalden su impacto real en la resolución de conflictos. En muchos casos, el CEJA Móvil se reduce a ser una caja instalada temporalmente en los municipios, sin personal capacitado suficiente ni un verdadero esfuerzo por acercar la justicia de manera efectiva a la ciudadanía.
Mientras tanto, Bañuelos sigue posando para eventos y fotografías oficiales, promoviendo una gestión más simbólica que efectiva. La constante presencia en actos protocolarios contrasta con la ausencia de acciones de fondo para atender los problemas estructurales del Poder Judicial, como la falta de transparencia, la saturación de juzgados y la ineficiencia en la atención a los justiciables.
Sin una estrategia real de comunicación que informe adecuadamente a la población sobre las supuestas ventajas de la justicia alternativa, ni mecanismos de evaluación que permitan medir su efectividad, el CEJA Móvil parece ser otro esfuerzo fallido que refleja el patrón de una administración desconectada de las necesidades ciudadanas.
